No sé, si esto es lo que me tiene guardado la vida,
no sé, quisiera saber, pero no sé.
No me quejo,
solo faltaría eso,
pero yo no me quejo,
solo espero el momento,
el momento que viene de lejos,
y no llega,
y se para en el tiempo,
y yo no lo veo.
Bailando se van las palabras,
se me escapan de la manga,
salen alborotadas,
y yo las escribo en esta entrada.
No sé, no sé,
ahora no quiero saber,
como se visten los ciegos,
como se aprende a saber,
como se enciende la Luna,
como se apaga esta sed,
no, no, no quisé ni querré,
el sabor de los labios de miel,
que esconden el más oscuro anhelo,
verme enloquecer.
No sé, de verás, no lo se,
no me preguntes por qué,
ya te repito por última vez,
nunca lo sabré.
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